Receta fácil para hacer ajo en polvo: un condimento versátil

El ajo en polvo es un condimento versátil que puede agregarse a una amplia variedad de platos para darles un sabor intenso y delicioso. Aunque puedes comprar ajo en polvo en la tienda, hacerlo en casa tiene sus propias ventajas. No solo podrás controlar la calidad de los ingredientes, sino que también ahorrarás dinero a largo plazo. Además, hacer ajo en polvo casero te permite utilizar ingredientes frescos y crear un condimento más sabroso. En este artículo, te enseñaremos una receta fácil para hacer ajo en polvo en casa, paso a paso.

Paso 1: Pelar y cortar los dientes de ajo

Como hacer ajo en polvo

El primer paso para hacer ajo en polvo casero es pelar y cortar los dientes de ajo. Comienza pelando la piel exterior de los ajos, asegurándote de quitar todas las capas hasta llegar al diente de ajo en sí. Una vez que los ajos estén pelados, córtalos en trozos finos. Puedes hacer esto utilizando un cuchillo afilado o una mandolina para obtener rebanadas uniformes.

Es importante recordar que cuanto más finos sean los trozos de ajo, más rápido se deshidratarán en el horno y más fácil será triturarlos más adelante. Por lo tanto, intenta cortar los trozos de ajo lo más finos posible, sin comprometer la seguridad en el manejo del cuchillo. Recuerda también tener cuidado de no cortarte mientras pelas y cortas los ajos.

Paso 2: Cocinar en el horno a baja temperatura para deshidratar

Como hacer ajo molido

Una vez que hayas pelado y cortado los dientes de ajo, es hora de deshidratarlos en el horno. Precaliente el horno a una temperatura baja, alrededor de 150 grados Celsius (300 grados Fahrenheit). Coloca los trozos de ajo en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino o una estera de silicona.

Es importante que los trozos de ajo estén en una sola capa en la bandeja para hornear, para que se deshidraten de manera uniforme. Si pones demasiados trozos en la bandeja, es posible que algunos se deshidraten más rápido que otros, lo que puede dificultar el proceso de triturarlos más adelante.

Una vez que el horno esté precalentado y los trozos de ajo estén en la bandeja para hornear, colócala en el horno y deja que se deshidraten durante aproximadamente 2 horas. Sin embargo, el tiempo de horneado puede variar dependiendo del grosor de los trozos de ajo. Por lo tanto, es importante revisarlos regularmente para asegurarte de que no se quemen.

Durante el horneado, los trozos de ajo se secarán lentamente y se volverán más crujientes. Sabrás que están listos cuando estén completamente secos y se deshagan fácilmente al tocarlos. Una vez que estén listos, retira la bandeja del horno y deja que los trozos de ajo se enfríen por completo.

Paso 3: Triturar en una licuadora o mortero

Cuando los trozos de ajo estén completamente fríos, es hora de triturarlos en una licuadora o mortero. Verter los trozos de ajo en el recipiente de la licuadora o mortero y triturarlos hasta obtener una consistencia de polvo fino.

Si utilizas una licuadora, puedes triturar los trozos de ajo a alta velocidad durante unos segundos hasta que se conviertan en polvo. Si prefieres utilizar un mortero, coloca los trozos de ajo en el mortero y muélelos utilizando un movimiento circular y presionando hacia abajo con el mortero hasta que se conviertan en polvo.

El proceso de triturar los trozos de ajo puede llevar tiempo y esfuerzo, especialmente si estás utilizando un mortero. Sin embargo, el resultado vale la pena, ya que obtendrás un ajo en polvo casero de alta calidad con un sabor y aroma intensos.

Paso 4: Almacenar en un recipiente

Una vez que hayas triturado los trozos de ajo en polvo, es importante almacenarlos de manera adecuada para mantener su frescura y sabor. Transfiere el ajo en polvo a un recipiente hermético y guárdalo en un lugar fresco y oscuro, como la despensa.

También te puede interesar: Guía definitiva para hacer kéfir de leche casero

El ajo en polvo casero puede durar hasta 6 meses si se almacena correctamente. Sin embargo, es posible que encuentres que su sabor y aroma se desvanezcan un poco a medida que pasa el tiempo. Por lo tanto, es recomendable utilizarlo dentro de los primeros meses para obtener el mejor sabor posible.

Uso y recetas con ajo en polvo

El ajo en polvo es un condimento muy versátil que se puede utilizar en una amplia variedad de recetas. Aporta un sabor intenso y un toque único a los platos y puede mejorar drásticamente su sabor. A continuación, se presentan algunas ideas para utilizar el ajo en polvo en tus recetas:

- En adobos y marinas: Agrega ajo en polvo a tus adobos y marinas para darles un sabor más robusto y delicioso. Puedes utilizarlo en adobos para carnes, pollo, pescado o incluso verduras.

- En salsas y aliños: Añade ajo en polvo a tus salsas y aliños caseros para realzar su sabor. Puedes utilizarlo en salsas de tomate, salsas cremosas o vinagretas.

- En sopas y guisos: Agrega ajo en polvo a tus sopas y guisos para darles un sabor más profundo y aromático. Puedes utilizarlo en sopas de vegetales, guisos de carne o incluso en chiles.

- En platos al horno: Espolvorea ajo en polvo sobre tus platos al horno, como gratinados, lasañas o panes, para darles un toque extra de sabor. También puedes incorporarlo en la masa para obtener un sabor más intenso.

- En aderezo para palomitas de maíz: Mezcla ajo en polvo con mantequilla derretida y viértela sobre palomitas de maíz recién hechas para crear un delicioso aderezo casero.

Estas son solo algunas ideas para utilizar el ajo en polvo en tus recetas, pero las posibilidades son infinitas. No temas experimentar y agregarlo a tus platos favoritos para darles un toque de sabor adicional.

Consejos adicionales y variaciones para hacer ajo en polvo casero

- Si prefieres un sabor más suave, puedes hornear los trozos de ajo a una temperatura más baja durante un tiempo más largo. Esto permitirá que el ajo se seque lentamente y mantenga su sabor más suave.

- Puedes personalizar el sabor de tu ajo en polvo casero agregando especias adicionales. Algunas opciones populares incluyen pimentón, cebolla en polvo, orégano o tomillo. Experimenta con diferentes combinaciones para encontrar tu mezcla de condimentos perfecta.

- Si no tienes una licuadora o mortero, puedes utilizar un procesador de alimentos para triturar los trozos de ajo. Solo asegúrate de utilizar la configuración de pulso y no procesarlos durante demasiado tiempo, ya que pueden convertirse en pasta en lugar de polvo.

- Si quieres hacer ajo molido en lugar de ajo en polvo, simplemente tritura los trozos de ajo en la licuadora o mortero durante más tiempo hasta obtener una consistencia más gruesa. Esto es ideal para agregar a tus adobos o marinadas, donde prefieres una textura más gruesa.

Conclusión

Hacer ajo en polvo casero es una forma sencilla y económica de tener a mano este condimento tan versátil. Pelar, cortar, deshidratar y triturar los dientes de ajo te permitirá obtener un ajo en polvo casero de alta calidad con un sabor y aroma intensos. Una vez que lo hayas hecho, podrás utilizarlo en una amplia variedad de recetas para realzar el sabor de tus platos favoritos. Así que no dudes en probar esta receta y disfruta del sabor del ajo en polvo casero en tus comidas diarias.

También te puede interesar: 6 recetas saludables con pollo para disfrutar comiendo
Juan Castro

Juan Castro

Convierto ideas en contenido que deja huella.

Relacionado

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Go up