9 señales para saber si tu gata va a parir próximamente

10 meses ago

El momento del parto de una gata es un evento emocionante y lleno de detalles que debemos conocer para asegurarnos de estar preparados para recibir a los nuevos miembros de nuestro hogar. Es importante estar atentos a las señales que nos indica nuestra gata, ya que el parto es un proceso natural pero también delicado. En este artículo, te daremos las principales señales para saber si tu gata va a parir próximamente y cómo puedes ayudarla durante este proceso.

Cambios en el comportamiento de la gata

Uno de los primeros indicadores de que tu gata está próxima a dar a luz son los cambios en su comportamiento. Puede volverse más amorosa y demandante de atención, buscando constantemente tu compañía. También puede mostrar signos de nerviosismo y ansiedad, buscando lugares cómodos y seguros para prepararse para el parto.

Es importante tener en cuenta que cada gata es diferente y puede manifestar estos cambios de comportamiento de manera distinta. Algunas gatas se vuelven más cariñosas y tranquilas, mientras que otras pueden volverse más distantes y hurañas. Observa el comportamiento de tu gata para identificar estas señales.

Preparación del nido

Otra señal clara de que tu gata está a punto de dar a luz es que comenzará a buscar un lugar adecuado para crear su nido. Puede ser que busque espacios protegidos y acogedores, como armarios, cajas o rincones de la casa. Es común que tu gata busque un lugar tranquilo y alejado de las miradas indiscretas para sentirse segura durante el parto.

Puedes ayudar a tu gata proporcionándole una caja grande y cómoda con ropa suave en su interior, para que pueda crear su nido y sentirse más cómoda durante el parto. Asegúrate de que el lugar elegido por tu gata sea tranquilo y accesible para ella, pero también ten en cuenta que no sea un lugar de alto tránsito, para evitar cualquier interrupción durante el proceso.

Disminución del apetito

Otra señal de que tu gata está próxima a dar a luz es la disminución de su apetito. Durante las últimas etapas del embarazo, es normal que las gatas reduzcan la cantidad de alimento que consumen, ya que el espacio en su abdomen se reduce debido al crecimiento de los cachorros. Esta disminución en el apetito es natural y no debes preocuparte siempre y cuando tu gata no presente otros síntomas preocupantes.

Es importante monitorear el estado de alimentación de tu gata durante este periodo y asegurarte de que continúe bebiendo agua correctamente. Si notas una reducción significativa en su apetito o si presenta otros síntomas como vómitos o diarrea, es recomendable consultar con un veterinario para descartar cualquier problema de salud.

Aumento de la inquietud

A medida que el parto se acerca, es común que las gatas se vuelvan más inquietas y busquen constantemente un lugar adecuado para dar a luz. Puedes notar que tu gata está más agitada y que no encuentra una posición cómoda para descansar.

Es importante ser paciente y comprensivo con tu gata durante esta etapa, ya que su inquietud es una respuesta natural a los cambios físicos que está experimentando. Proporciona un ambiente tranquilo y cómodo para que tu gata se sienta segura y relajada durante el parto.

Signos de dilatación del cuello del útero

Un signo claro de que el parto está cerca es la dilatación del cuello del útero. Puedes observar si el cuello del útero de tu gata está dilatado introduciendo suavemente un dedo lubricado en la vagina. Si sientes una abertura lo suficientemente grande como para permitir el paso de un cachorro, significa que el parto está próximo.

Es importante recordar que solo un veterinario debe realizar esta evaluación, ya que es necesaria una técnica adecuada y experiencia en el manejo de gatas preñadas. La manipulación incorrecta puede causar lesiones a la gata o interferir con el proceso natural del parto. Si tienes dudas sobre si tu gata está dilatando correctamente, es recomendable acudir a un especialista.

Contracciones y esfuerzos

Una vez que el cuello del útero está completamente dilatado, comenzarás a notar que tu gata tiene contracciones uterinas y hace esfuerzos para expulsar a los cachorros. Las contracciones pueden ser visibles desde el exterior, ya que la gata puede arquear su espalda y retorcerse mientras intenta empujar al cachorro hacia afuera.

Es normal que entre cada cachorro haya un intervalo de descanso, donde la gata se relaje antes de comenzar con las contracciones nuevamente. Durante este periodo, es importante no interrumpir el proceso y permitir que la naturaleza siga su curso.

Expulsión de los cachorros y las placentas

La expulsión de los cachorros y las placentas es un paso crucial del parto. Cada cachorro será expulsado envuelto en una bolsa amniótica, que la gata romperá al lamer al cachorro. Si notas que tu gata no rompe la bolsa o no se encarga de limpiar al cachorro, puedes ayudar suavemente a romper la bolsa y limpiar al cachorro con una toalla suave.

Después de cada cachorro, la gata también expulsará la placenta correspondiente. Es normal que la gata se coma la placenta, ya que esto es instintivo y les proporciona nutrientes necesarios. Sin embargo, algunas gatas pueden no hacerlo, lo cual no representa un problema siempre y cuando la expulsión de las placentas sea completa.

Cuidados posteriores al parto

Después de que todos los cachorros hayan sido expulsados y las placentas hayan sido eliminadas, es importante prestar atención a los cuidados posteriores al parto de tu gata. Debes dejar que tu gata descanse en su nido y se recupere del esfuerzo del parto.

Durante esta etapa, es clave proporcionar a tu gata una alimentación adecuada y de calidad para recuperar su energía. También debes asegurarte de mantener el entorno limpio y tranquilo para que la gata se sienta cómoda y segura.

Cuándo acudir al veterinario

Si bien el parto de una gata es un proceso natural, existen situaciones en las que es necesario acudir al veterinario. Algunas de las circunstancias que requieren atención veterinaria durante el parto son:

- Si han pasado más de 65 días desde la fecha de la monta y la gata aún no ha dado a luz.
- Si la gata muestra signos de dolor intenso durante el parto o si las contracciones se detienen por más de dos horas.
- Si la gata muestra signos de fatiga extrema o debilidad durante el parto.
- Si uno de los cachorros está atascado en el canal de parto o si la gata está teniendo dificultades para expulsar a los cachorros.
- Si la gata presenta algún tipo de sangrado o flujo anormal durante el parto.

En caso de cualquiera de estas situaciones, es fundamental buscar ayuda veterinaria para garantizar el bienestar de la gata y los cachorros.

Conclusión

El parto de una gata es un evento emocionante y lleno de detalles para observar. A través de las señales mencionadas anteriormente, como los cambios en el comportamiento, la preparación del nido, la disminución del apetito, el aumento de la inquietud, los signos de dilatación del cuello del útero, las contracciones y esfuerzos, la expulsión de los cachorros y las placentas, los cuidados posteriores al parto y cuándo acudir al veterinario, podrás saber si tu gata está próxima a dar a luz.

Recuerda siempre estar atento a los cambios en el comportamiento de tu gata y brindarle un ambiente tranquilo y seguro para ella y sus cachorros. El seguimiento adecuado durante el parto y los cuidados posteriores serán clave para garantizar la salud y el bienestar de tu gata y sus nuevas crías.